El buen amor no duele ni lastima, construye.

El buen amor no duele y no lastima, construye y fortalece tanto a la persona como a la pareja.

Hay muchas personas que luego de una relación dolorosa se niegan la posibilidad de volver a amar y ser amados. Esto ocurre mucho y no es un mal reciente; lo bueno es que se puede sanar con un poco de voluntad y fe en ti.

El amor como constructor y fortaleza.

Dejar que otros te quieran en un acto de fe; la razón es que depositas tu confianza y te haces frágil en manos de la persona amada. Asumes el riesgo de que la persona que amas te haga daño confiando en que eso no suceda.

El amor verdadero es hermoso y está ligado a cuidar y brindar felicidad. Sí, hay momentos de dificultad, pero estos no se usan como excusa para lastimar; en cambio, sirven para construir y solidificar la relación.

Por supuesto, este tipo de relaciones solo surgen cuando ambas personas son responsables y maduros emocionalmente hablando.

¿Cómo puedes saber si es amor de verdad?

La realidad es que el amor verdadero es bastante fácil de identificar. El problema es que al estar enamorado se pierde toda noción de realidad. Vemos en la persona amada a alguien perfecto e inigualable; solo vemos en él o ella lo que nosotros deseamos ver. Por esta razón, muchas veces los malos tratos se pasan por alto; incluso, se catalogan bajo el título: “me trata así porque me ama”. No, el buen amor no lastima.

John Gottman  dice que el secreto para que una relación sea duradera y feliz está en saber obsequiarse. Dicho de otra forma: saber darse al otro, tener presente las necesidades de la pareja, ser honesto en el interés y crear significados y valores compartidos.

Desde esta perspectiva, el dolor y la falta de respeto o incomprensión, no tiene lugar en una relación llena de amor.

El desamor deja huella en nuestro cerebro

Algo que es de verdadero valor, es que incluso si en relaciones anteriores has sido lastimada, puedes amar como si eso jamás hubiera ocurrido.

Desde luego, después de salir de una relación difícil se necesita un tiempo prudente para hacer el debido proceso de sanación. Esto con el fin de no volcar en la nueva pareja todas las frustraciones y daños de la relación anterior.

Cuando la sanación emocional ha ocurrido, la persona está lista para volver a amar sin condiciones, desconfianza o amargura. Pese a todo esto, hay personas que creen que no hay amor sin dolor. Esto se debe a sus experiencias anteriores así se lo han enseñado. Esto recibe el nombre de Desamor.

Un estudio publicado en la revista “Journal of Neurophysiology se explica que cuando hay una ruptura o decepción amorosa, el cerebro reacciona de la misma manera que si la persona hubiera sufrido una herida en su cuerpo. Es justo por esta razón que el proceso de sanación emocional se hace importantísimo; de otra manera, lo que siempre estaremos viviendo en cada relación amorosa que tengamos serán experiencias negativas.

Sanación emocional ¿Cómo es el proceso?

Cuando hay un trauma emocional causado por una ruptura amorosa trágica, hay tejidos neuronales que se ven afectados.

Si fuéramos capaces de darnos cuenta que tenemos que reconstruir y fortalecer esos tejidos dañados, disfrutaríamos del equilibrio necesario para tener en paz.

Dan Siegel es un psiquiatra que desarrolló la teoría de la “neurobiología interpersonal”. Él explica que existe una manera de sanar esos tejidos neuronales dañados tras un fracaso sentimental, y es por medio de la meditación.

Básicamente, lo que se busca al practicar meditación, aparte de sanar nuestro cerebro, es reconectar con nosotros mismos. De esa forma lo que se logra es encontrar un equilibrio y desligar el dolor del amor. Es más como un proceso para poder volver a creer en el amor y así poder volver a confiar y poder darnos a los demás.

El proceso de sanación emocional.

Sanar el trauma de una ruptura amorosa complicada puede tomar meses o incluso años. Es de suma importancia lograr esto porque de otra manera solo vivirás relaciones llenas de desamor. Si no sanas vas a atraer a tu vida el mismo tipo de pareja: dañina y destructivas, esto porque vas a tener tu amor propio deteriorado.

Nadie quiere volver a sufrir la misma situación 2 o 3 veces, pero ocurre. Por lo anterior es vital hacer ese proceso; esa es la única manera de reconocer lo que te mereces respecto al amor.

Fuente: familias.com